Quizás recordéis la noticia de Septiembre 2015, aparecida en la prensa sobre unos cultivos muy particulares – la marihuana: «Desmantelada en Albacete una plantación de marihuana de Guinness». Se había encontrado un campo de 75.000 plantas de marihuana, la mayor plantación de Europa, dotada de las más altas tecnologías de regadío, en un pequeño pueblo de Albacete (España).
Bajo el sol radiante de Albacete y en solo 3 meses habían producido 155 kg de marihuana! Una selección de semillas modificadas genéticamente generaban plantas muy bajitas que desde un helicóptero de la policía podían ser confundidas con cualquier otra hierba. Estas plantas de marihuana estaban situadas entre los árboles de un olivar de 30.000 metros cuadrados.
El plan estaba bastante elaborado, habían pensado en todo, incluso en disimular los olores que desprenden las plantas de marihuana: Habían situado unas montañas de estiércol y basura de forma estratégica en los puntos colindantes con el terreno vecino.
Legalización de la marihuana
En España, la producción de marihuana recreativa está prohibida. En el resto del mundo, cada vez aumentan más las jurisdicciones, dónde se permite la producción y distribución de la marihuana (o también llamado Cannabis), bien para su uso medicinal o su uso recreativo.
El 5 de Noviembre 2015 hemos podido presenciar la legalización de la marihuana lúdica por los jueces de la Suprema Corte en México. Y hace pocas horas, Colombia ha anunciado la legalización de la marihuana, pero para uso terapéutico: «Colombia: Santos espera legalizar marihuana medicinal en tres o cuatro días».
La marihuana, una planta antigua con grandes indicaciones terapéuticas
La marihuana ya se utilizó hace 3000 años con fines terapéuticos. Fue introducida en la medicina occidental en el año 1840 por O’Shaughnessy, un cirujano que lo trajo de la India, dónde se utilizaba por su efecto analgesico, sedante, antiinflammatorio, antiespasmodico y anti-convulsivante (contra la epilepsia).
Durante muchos años la marihuana estaba prohibida en la mayoría de los países, clasificada como droga sin uso medicinal, pero actualmente la utilización terapéutica de la marihuana se está extendiendo. La marihuana se puede aplicar como medicamento para tratar con éxito los efectos colaterales del cáncer: Es antiemética (contra las náuseas y los vómitos), estimula el apetito de los pacientes con cáncer, alivia el dolor y mejora el sueño.
La marihuana produce una resina que contiene compuestos psicoactivos llamados cannabinoides, uno de ellos es el delta-9-tetrahydrocannabinol (THC). La planta de flores femeninas contiene una concentración mayor.
En 1986 se autorizó el THC sintético mezclado con aceite de sésamo para evitar los efectos de náuseas y vómitos en pacientes sometidos a la quimioterapia. Este medicamento resultó mucho mejor que los antieméticos habitualmente usados.
Como estimula la ganancia de peso, también se puede aplicar en pacientes con SIDA, por lo que su uso fue autorizado en 1992 también para el SIDA. Más tarde se legalizó para el tratamiento del dolor y para mejorar la movilidad en la Multiple Esclerosis y en cánceres avanzados.
Se han estudiado los cannabinoides durante décadas y el National Institute of Health, una organización contra el cáncer, incluso establece que los cannabinoides pueden causar efectos antitumorales por distintos mecanismos:
- Inducción de la muerte celular de las células cancerosas
- Inhibición del crecimiento de las células malignas
- Inhibición de la angiogenesis (impide la formación de vasos sanguíneos nuevos que necesita el cáncer para progresar).
- Inhibición de la invasión y de la metástasis
El investigador británico en el campo de la neurofarmacología, Professor Roger Pertwee, descubrió el tetrahydrocannabivarin (THCV) del cannabis en los años 70. Recientemente ha publicado que se ha encontrado un nuevo potencial terapéutico para este componente de la marihuana: no tiene actividad psicoactiva, pero sin embargo, tiene efecto anti esquizofrénico.
Pero lo más sorprendente: todos nosotros tenemos un sistema cannabinoide interno
Se han identificado receptores que tenemos en nuestro propio cuerpo, tomemos o no tomemos cannabis: los llamados CB1 y CB2. Estos receptores se encuentran en las células inmunitarias (linfocitos B y células «killer») que sugieren un papel en la defensa del organismo.
Pero por qué todos poseemos estos receptores para los cannabinoides si nunca hemos fumado marihuana?
El sistema interno de cannabinoides se genera naturalmente por nuestro propio organismo! Los cannabinoides que produce nuestro cuerpo se denominan endocannabinoides y juegan un importante papel en la modulación del dolor, control del movimiento, comportamiento al alimentarse y la memoria.
Nuestro cuerpo utiliza el sistema endocannabinoide para la comunicación entre nuestros tejidos para regular y mantener el equilibrio y la función celular. Y los cannabinoides de la marihuana pueden interactuar con nuestro sistema endocannabinoide del cuerpo, siendo utilizados para multitud de enfermedades que os dejo en este link: Emerging clinical applications for cannabis and cannabinoids (Aplicaciones clínicas emergentes de cannabis y cannabinoides)
Hasta aquí, los estudios existentes. Juzguen Ustedes mismos!
Referencias:
Emerging clinical applications for cannabis and cannabinoids (Aplicaciones clínicas emergentes de cannabis y cannabinoides)
Cannabis and Cannabinoids–for health professionals (PDQ®)
Liver Cancer and Cannabis: Study Finds Cannabinoids Have Anti-Tumoral Effect on HCC
How Marijuana Treats Diseases: The Far Reach of the Endocannabinoid System
The Biochemist Who Cured His Cancer With Cannabis Oil
El consumo de marihuana se duplicó entre los estadounidenses en la última década, según un informe. Pero el neuropsiquiatra y director del Center for Medicinal Cannabis Research (CMCR) de la Universidad de California, San Diego, Dr. Igor Grant que estudia los efectos neuropsiquiatricos de la marihuana a corto y largo plazo concluye que no se ha podido demostrar daños en el cerebro en personas que usan la marihuana de forma recreativa.
Una pizca de salud: No te pierdas lo que dice la ciencia 
Hola Yvonne,
hace unas semanas publiqué un artículo precisamente sobre el consumo de marihuana a lo largo de los siglos y con tu permiso compartiré algún dato aquí desde este punto de vista. Ya se evidencia en restos arqueológicos su consumo en el siglo IV y los cartagineses lo utilizaban para elevar la moral de los marineros que atravesaban el Mediterráneo. De Egipto, Grecia y de los celtas pasaría a la antigua Roma, donde lo consumían quienes podían permitírselo pagar (el pueblo usaba el opio en su lugar, mucho más barato). Para que te hagas una idea de su consumo, en la ciudad de Roma se distribuía en más de 700 tiendas, un volumen de negocio de lo más rentable ya que se recaudaba el 15% de toda la recaudación fiscal en aquellos tiempos. Dioscórides, Plinio el Viejo y Galeno lo recomendaban como terapéutico para calmar la tos, para tratar la artritis e incluso para la… ¡gonorrea!, aunque ya advertían de que su elevado consumo podía ocasionar problemas como el «secar» el esperma de los hombres. Otro dato interesante, ya en la Antigüedad apreciaban y mucho su cultivo en la Meseta de Hispania.
Un besote y por cierto… me encanta el look de tu blog.
PD. He intentado compartir por twitter el artículo pero no he podido, revísalo 😉
Me gustaLe gusta a 1 persona
Hola Francisco Javier,
muy bueno tu artículo! Un enfoque interesante del tema desde la historia! No sabía que en la antigüedad la distribución de marihuana era tan extensa…. es comparable con lo que pasa hoy en día con el alcohol. Pero los romanos tomaban las dos cosas ….una vida divertida, pero más bien corta, ningún problema con las pensiones, ji,ji, ji
Un fuerte abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona
Mi mujer sufre fibromialgia … no te digo más, Yvonne, solo que rezamos todos los días para que se legalice.
Me gustaMe gusta
Hola Enrique,
en España hay medicamentos que están autorizados: Nabilone y Sativex.
http://sensiseeds.com/es/blog/sativex-ya-esta-disponible-en-toda-europa-al-disminuir-la-oposicion-al-cannabis-medicinal/
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias, ivonne. Me lanzo a informarme de ellos.
Me gustaLe gusta a 1 persona